En el post de hoy venimos a hablaros de una de las obras que más fronteras ha traspasado: El Doncel de Sigüenza. Recogido en innumerables comentarios de arte o en el libro El Espectador, del filósofo José Ortega y Gasset, su fama es ya universal.
Y no, no nos referimos al Restaurante Estrella Michelín el Doncel que tan buenas opiniones ha cosechado, sino a una de las esculturas fúnebres más bellas del mundo, ubicada en la provincia de Guadalajara.
¿Quieres saber más sobre Sigüenza y su Doncel? En este post te desvelamos algunos de los secretos mejor guardados de la Catedral de Santa María y, por supuesto de su habitante más famoso: el Doncel de Sigüenza.
Índice de Contenidos
La historia del Doncel de Sigüenza
Martín Vázquez de Arce
Se llamaba Martín Vázquez de Arce y, «retratado» a sus 25 años -edad a la que murió- estaba lejos de ser un Doncel. En la época, se denominaba así a los jóvenes de entre 12 y 16 años hijos de nobles o hidalgos que aún no habían tenido pareja. Sin embargo, se sabe que Martín estuvo casado y tuvo una hija.
El Doncel de Sigüenza y la Familia Mendoza
Si bien el título era inadecuado a todas luces por su edad, sí estaba, en cierto modo, vinculado a la nobleza, concretamente a la Familia Mendoza. Su padre, Fernando de Arce, Comendador de la Orden de Santiago, ejerció como secretario del Primer Duque del Infantado, Diego Hurtado de Mendoza. Esto permitió a su hijo ser educado en el seno de una de las familias más influyentes de la España del Siglo XV.
Así, Martín recibiría la formación de cualquier caballero de su época, lo que le llevaría a ejercer una larga actividad militar con los Mendoza al servicio de los Reyes Católicos.
La muerte del joven Caballero de la Orden de Santiago
Martín Vázquez de Arce luchó al lado de los Reyes Católicos por la reconquista del Reino de Granada. Sin embargo, no llegó a ver cómo tomaron la ciudad, ya que perdió la vida en una emboscada.
En el año 1486, en la Campaña de Loja, y tras una exitosa batalla en la Vega de Granada, su escuadrón fue sorprendido por los musulmanes, quienes emplearon la conocida como Acequia Gorda para ahogar y, finalmente, matar al Doncel y sus hombres.
El origen de la leyenda del «Doncel»
Sin embargo lo que realmente llevaría a la fama a Martín, no sería su vida sino su muerte y, concretamente, su tumba. Alabada por Ortega y Gasset en su libro El Espectador atrajo a Miguel de Unamuno hasta Sigüenza. Sería él quien, emocionado ante su sepulcro, lo apodó así por el aspecto de su rostro. Aquel halago llevaría a la escultura a un punto de no retorno: Martín Vázquez de Arce se convertiría en el Doncel de Sigüenza.
Fernando Vázquez de Arce y el sepulcro del Doncel
Sería su hermano Fernando, Obispo de Canarias, el encargado de que los restos de Martín descansasen en el sepulcro de la capilla de San Juan y Santa Catalina.
Fue él quien pidió permiso al cabildo de la Catedral para enterrarlo allí. También quien encargó -supuestamente, pues su autoría es anónima- a Sebastián de Almonacid la famosa escultura.
El simbolismo de una de las principales esculturas del gótico tardío en España
Como ya sabemos, el Martín Vázquez de Arce murió en combate contra los musulmanes en una supuesta Guerra Santa. Por ello, al morir, además de la fama -tan importante para los caballeros del momento-, también conseguiría la Gloria del Cielo, su máxima aspiración.
En este sentido, la escultura es tremendamente simbólica: el laurel representa la fama y el león la Gloria de la resurrección. También el libro que tiene entre sus manos alimenta la imaginación: ¿reza, sueña, medita?
Te invitamos a hacer una visita a Sigüenza y su Catedral para encontrar la respuesta a esta pregunta.
La Catedral de Sigüenza: hogar del Doncel
Una pincelada de la historia de la Catedral de Sigüenza
Al llegar a Sigüenza, la imagen de la Catedral de Santa María lo domina todo, y es que esta ciudad ha crecido con ella. Su aspecto es mucho menos estilizado que el de la mayoría de las catedrales, como si fuera más robusta.
Cuando Sigüenza era todavía musulmana, Alfonso VII nombró obispo a Bernardo de Agén, un eclesiástico francés ,caballero y guerrero. Su misión era reconquistarla y así lo hizo, se instaló en el castillo y ordenó la construcción de la Catedral. Este primer obispo de Sigüenza es el más legendario pero no es ni el más conocido ni el más influyente. Por la diócesis seguntina pasaron personajes decisivos en la Historia de España como el Obispo Carrillo o el Cardenal Mendoza.
Alonso Carrillo de Acuña fue decisivo en la guerra sucesoria castellana que acabó con la coronación de Isabel la Católica. González de Mendoza fue apodado El Tercer Rey de España por su influencia durante el reinado de los Reyes Católicos. Este personaje renacentista fomentó las artes y las letras e impulsó nuevas obras en la Catedral. También renovó el Castillo como residencia episcopal, ordenó construir la Plaza Mayor y creó la Universidad.
El corazón de la ciudad de Segontia: entre la espiritualidad y las fortalezas de la Edad Media
La Catedral de Sigüenza comenzó a construirse en 1124 y se consagró en 1169, hace 850 años, aunque entonces no era tan majestuosa. Se completó al comenzar el Siglo XV, aunque luego tuvo algunas ampliaciones.
La construcción debe su manifiesto aspecto bélico a que sus primeros obispos también lucharon en la Reconquista. De hecho, inicialmente estuvo integrada en la muralla de la ciudad. De ahí su apariencia robusta y «de fortaleza». De esa época inicial, románica y con influencia cisterciense, datan las torres y las portadas de la fachada principal. También es románico el rosetón que se abre a la Plaza Mayor, el único de este tipo en España.
Sin embargo, la Catedral de Sigüenza conserva en su interior su faceta más humanista.
Su máxima expresión es la Tumba del Doncel -que no se encuentra en la Casa del Doncel, como algunos creen-. Pero también nos referimos a una arquitectura gótica que invita a la espiritualidad. Las bóvedas, las columnas y los muros y ventanales interiores son protogóticos, y el Claustro, gótico tardío.
Posteriormente, se realizaron ampliaciones y modificaciones, interiores y exteriores, renacentistas, barrocas y neoclásicas.
Descubriendo los secretos de la Catedral de Sigüenza
Puedes hacer un recorrido libre que te permitirá contemplar la grandeza de la Catedral: rosetones, retablos, sillería, rejería… Incluso podrás asomarte a la capilla de San Juan y Santa Catalina, donde está la tumba del Doncel.
Pero sólo en una visita guiada a la Catedral de Sigüenza podrás conocer lo más destacado: Sacristía Mayor, Capilla de las Reliquias, Claustro. La primera, llamada de las Cabezas porque tiene esculpidas en su techo cientos de caras, es obra de Covarrubias. Muchos expertos en arte aseguran que esta Sacristía es una de las auténticas joyas de la Catedral de Siqüenza. En la Capilla de las Reliquias se conserva, entre otras obras de arte, una Anunciación de El Greco. El Claustro no es sólo para verlo de lejos: pasear por él y respirar su atmósfera es una experiencia imprescindible. Y, por supuesto, ¿cómo no acercarse al sepulcro del Doncel de Sigüenza y dejarse llevar por la imaginación?
Puedes visitar la Catedral de Sigüenza muy fácilmente desde nuestros alojamientos y así conocer más de cerca la historia de la Catedral y su figura más famosa.
The Doncel of Sigüenza: where is it? Accomodation nearby and useful information
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